La Inmigración Es un Asunto de Familia

by | Jun 21, 2018

Conocí a Fredy Díaz hace unos 10 años en una reunión de líderes latinos de nuestra Diócesis. En aquel entonces asistía a Saint Matthew’s /San Mateo, donde era miembro de su junta parroquial. Su carisma y personalidad energética se destacaron de inmediato.

A través de los años, llegué a conocer algo de la historia de Fredy: vino a los Estados Unidos de Honduras cuando tenía solo 17 años, y durante los siguientes 20 años estableció su vida y comenzó una familia aquí.

En 2015, Fredy y su familia se mudaron a Gaithersburg, donde con su esposa Berta y sus tres hijos nacidos en los Estados Unidos se unieron a la Iglesia de la Ascensión. Fredy y Berta son supervisores en sus lugares de trabajo–él trabaja en una empresa de landscaping, donde maneja los equipos de trabajo y negocia nuevos contratos, y ella es Directora de limpieza y mantenimiento de cuartos de un hotel.

En Ascensión, Fredy asumió el liderazgo como miembro de “La Mesa Latina”, el grupo de liderazgo congregacional. Fredy se hizo cargo de los terrenos de la iglesia y los mantuvo con mucho cuidado y cariño. Comenzó a administrar la tecnología para los servicios de la congregación latina, transmitiendo los servicios dominicales en línea y produciendo las presentaciones de PowerPoint para proyectar los servicios en pantalla. Participa en el Ministerio Felicidad, que ofrece almuerzos para jornaleros y personas sin hogar. Fredy también es cantante y compositor. En su poco tiempo libre ha producido dos CDs.

Hace dos semanas, el Servicio de Inmigración y Control de Aduanas de EE. UU. (ICE, por sus siglas en inglés), estaba esperando a Fredy cuando se dirigía a su trabajo muy de mañana. Ahora se encuentra en un centro de detención en Glen Burnie, MD, donde permanece encarcelado. La familia está tambaleándose. Los niños están desconcertados. Berta está tratando de mantenerse fuerte haciendo lo necesario para llegar al fin del mes y haciendo lo posible por consolar a los niños. La gente de Ascensión, Gaithersburg están apoyando a la familia como pueden, a través de donaciones financieras, así como a través de una red de apoyo que ofrece asistencia de muchas maneras, con la esperanza de hacer que los niños experimentan la vida en la manera más normal posible durante la ausencia de su “Papi.”

Entendemos que el abogado de Fredy ha podido aplazar cualquier procedimiento de deportación hasta que las autoridades de inmigración les notifiquen si van a reabrir su caso. Pedimos sus oraciones por Fredy, Berta y sus hijos, y por todas nuestras familias inmigrantes, que están comiendo el pan de ansiedad durante estos tiempos aterrorizantes.

Si quieren saber cómo pueden ayudar de manera más directa o por saber más de Fredy, contacten a la Iglesia de la Ascensión haciendo clic aquí.